Muchos niños y jóvenes mantienen una cercana relación con la tecnología actual llegando a tener serios problemas de adicción por culpa de la distracción digital. El uso de la tecnología forma parte de la enseñanza actual como uno de sus ejes principales, pero esa misma tecnología pasa a ser el vehículo principal de distracción en los jóvenes estudiantes (y no tan jóvenes).
Es importante tener en cuenta que las distracciones no son siempre malas, pero deben ser controladas de una forma eficiente por parte de los padres y maestros.
Antes la distracción por parte del estudiante tenía un espacio y tiempo determinado en el hogar de manera muy diferente a la de hoy en día. A excepción de la televisión, las alternativas de ocio requerían ser planificadas, como las actividades que se realizaban con amigos.
En cuanto a la distracción digital, este es el principal enemigo de la plataforma educativa en línea, ya que la cantidad de tiempo comprometido al estudio pasa a ser inferior en proporción al que se le dedica al ocio.
Los padres y los docentes de un grupo de actividades no presenciales deben poder manejar la tecnología de forma eficiente para los jóvenes; sin dejar un margen para que se desvirtúe el proceso.
En la actualidad las actividades en línea son herramientas fundamentales para el buen desarrollo del entorno educativo; incluso, en algunos casos, es el recurso principal de enseñanza en los programas educativos.
El año 2020 demostró que este tipo de herramienta en línea es absolutamente necesaria y única para el apoyo del sistema educativo, aunque también son grandes aliadas para la distracción del alumnado.
Tabla de contenidos
Dispositivos que distraen al estudiante
La distracción digital presenta tres características fundamentales:
- Emplea la conexión en línea para actividades no relacionadas al aprendizaje.
- Expone demasiada información del estudiante de manera indiscriminada a la amplitud del internet.
- Complica la concentración en las actividades académicas.
La gran variedad de herramientas digitales, como el ordenador, están presentes en casi todos los hogares del mundo.
Si hablamos de las cualidades técnicas de dispositivos digitales, es muy fácil concluir que existen muchos dispositivos que a pesar de que no fueron destinados a actividades relativas a la educación y el aprendizaje, pueden servir para este propósito. Las tabletas, los teléfonos inteligentes de mediana y alta gama y los accesorios inteligentes son solo algunos de ellos. Estos dispositivos no son solo para el uso de comunicación del alumno, sino que han pasado a ser el principal medio de distracción en el ambiente estudiantil.
La amplia gama de recursos que ofrece un dispositivo electrónico, permite que los jóvenes se distraigan de sus estudios fácilmente si no cuenta con la supervisión adecuada.
Los principales equipos que promueven la distracción digital son los videojuegos, computador personal o teléfono inteligente; ya que se prestan como mecanismo de acción para el uso y abuso de las redes sociales, pérdida de horas de estudio o de sueño por distracción de las actividades importantes, entre otras.
Las aplicaciones y el progreso de los sistemas inalámbricos de alta velocidad, permiten el acceso a juegos en línea. La estructura de este tipo de juegos no contempla límites de tiempo, por lo que es usual que los estudiantes, especialmente adolescentes, pasen muchas horas en estos juegos.
Tienen características adictivas y consume todo el tiempo en distracción digital pura, pasando hoy en día a ser un gran problema en el rendimiento escolar. Esa generación formada por grupo de adolescentes, que principalmente están en edad escolar, puede mantenerse jugando durante horas o días.
Hoy en día, los adolescentes tienen el teléfono celular como un dispositivo de total privacidad, pueden encontrar el ocio y la distracción digital de múltiples maneras. Sin necesidad de cambiar de herramienta, un dispositivo inteligente de alto crecimiento emplea las aplicaciones o apps para diversas funciones. Algunas pueden incentivar al estudio y otras simplemente distraen al estudiante.
Distracción desde el hogar
El mayor reto para los padres de los estudiantes actuales, radica en cómo detectar dicha pérdida de tiempo. Un alumno en consulta directa de sus deberes educacionales, a través de una herramienta en línea está a un clic de pasar al ocio en pleno tiempo de dedicación a los estudios.
Esto ocurre de manera instantánea, y hace que el control por parte de los padres sea casi nulo. Se vuelve desde muy difícil a casi imposible que los estudiantes aprovechen el tiempo en su desempeño escolar.
Adicionalmente están las herramientas de mensajería con capacidad de chateo directo o grupal. Allí se encuentra la mayor distracción digital para todas las edades.
Los estudiantes comparten con compañeros en distintos grupos a modo de diversión, sin moverse de la comodidad en la que se encuentren ubicados, y estando siempre en línea.
El tiempo promedio de una conversación telefónica es mucho menor al tiempo que pasan en línea de un adolescente actual. Gran parte de la vida de los estudiantes transcurren totalmente en internet, con cantidades de tiempo impresionantes que se dedican a la distracción digital.
Tomando en cuenta que el tiempo de distracción es consumido en los hogares, se deben tomar alternativas para combatir el ocio. Solamente la disciplina, buena orientación por parte de los padres y seguimiento de cerca de los resultados, son las mejores alternativas para luchar contra la distracción digital.
Soluciones para combatir las distracciones digitales
Algunos países han decidido tomar acciones directas en contra de estos distractores; de modo que el tiempo de aprendizaje sea respetado de forma constante, sin negar por ello la posibilidad de obtener tiempo de ocio para cada estudiante.
Uno de ellos es el caso de Finlandia. Su sistema educativo no envía actividades escolares al hogar, haciendo que el cumplimiento de las tareas o asignaciones se cumplan en la jornada escolar ordinaria. Gracias a ello, los docentes pueden medir el rendimiento y mejoría del alumnado.
El uso de herramientas digitales para el aprendizaje se emplea en otras circunstancias especiales, como estudiantes que no pueden asistir de manera presencial al colegio por motivos de salud.
Para el resto de países que no emplean esta metodología, es necesario que se realice un estudio que cuantifique si el empleo de las herramientas electrónicas ocasiona distracciones digitales o un progreso real en la educación de los jóvenes.
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